Realidades sobre el empleo convencional y el Mundo de los Freelancers en general
Cuando analizamos aquellas cosas que más aman los freelancers y las razones que, más allá de la situación, impulsan a más y más personas a hacerse trabajadores independientes o freelance; es normal preguntarse, ¿Cuál de todas ellas es la de mayor peso?
¿Cuál es la mayor razón por la cual cada día hay más freelancers?
La razón de fondo y de mayor peso, según montones de estudios y mi propia experiencia personal, suele ser la libertad. Es decir, después de la necesidad, está la libertad personal y profesional que trabajar como freelancer ofrece. Y es que generalmente, quienes llegan al mundo del trabajo freelance, lo hacen porque tienen la necesidad de ganar dinero para su sustento, porque fueron despedidos de sus empleos por reducción de personal, o simplemente porque no encuentran empleo en medio de las recesiones económicas que suelen sufrir sus países de procedencia.
El panorama laboral en el mundo actual
Vivimos en un mundo que se supone de hombres libres, pero lo que vemos es a millones y millones de personas deseando tener un patrón, un sueldo fijo de quince y último, vacaciones, aguinaldos, jubilación, y bonos. Vivimos realmente en un mundo de "esclavos del trabajo", donde la mayoría de la gente no se da cuenta de que solo están ayudando a que alguien más realice sus sueños y se enriquezca, mientras ellos mismos tienen que esforzarse día tras día por tener algo de calidad de vida.
Las personas quieren tener un ingreso permanente porque "así han sido las cosas siempre"; porque fueron criados y educados para creerlo y para vivir de esa manera, porque tienen que mantener a sus familias y porque creen que la única forma de hacerlo es trabajar para alguien más, es decir, fueron programados para creer que ese es el único modo de subsistir en un mundo como el actual.
Pero lo del sueldo o ingreso fijo no es más que una ilusión
Y mejor ni hablemos del tema de jubilación y demás... Millones de personas suelen creer que tener un sueldo "fijo" de quince y último, les da garantía y seguridad; pero eso no es más que un espejismo, una ilusión que suele irse al traste en la mayoría de los casos.
Tu estabilidad laboral depende en dichos casos de que la economía vaya bien, de que la empresa esté bien, de que tu jefe esté feliz con tu trabajo, y de infinidad de factores más. Además, lo que tantos dan por un estilo de vida seguro, es decir, tener un sueldo periódico o fijo, suele convertirse en un arma de doble filo; en un lastre mental que se queda anclado en el subconsciente colectivo y que nos hace creer (o nos quiere hacer creer) que es posible vivir así para toda la vida, que podemos fiarnos de ese estilo de vida, de ese sistema de creencias y que quienes piensan de otra forma, están equivocados y solo ven quimeras.
Tu estabilidad laboral depende en dichos casos de que la economía vaya bien, de que la empresa esté bien, de que tu jefe esté feliz con tu trabajo, y de infinidad de factores más. Además, lo que tantos dan por un estilo de vida seguro, es decir, tener un sueldo periódico o fijo, suele convertirse en un arma de doble filo; en un lastre mental que se queda anclado en el subconsciente colectivo y que nos hace creer (o nos quiere hacer creer) que es posible vivir así para toda la vida, que podemos fiarnos de ese estilo de vida, de ese sistema de creencias y que quienes piensan de otra forma, están equivocados y solo ven quimeras.
Y no ven que, aún si duran muchos años trabajando en el mismo empleo, se aclimatan tanto que detienen su crecimiento profesional, se hacen buenos en solo una cosa, se especializan y cuando tienen que salir a buscar otro empleo a los años, les cuesta o les es imposible adaptarse a cualquier nuevo empleo (eso en el supuesto de que tengan la "suerte" de conseguir otro empleo).
No se dan cuenta de que su estilo de vida depende de dos palabras que puede decir en cualquier momento su jefe en la empresa: "Estás despedido". No se dan cuenta de que generalmente, están vetados para pedir o solicitar un aumento de sueldo, o que pueden solicitarlo, pero difícilmente se los darán. Simplemente, existen millones de personas que no se percatan que lo que ganan en sus empleos puede convertirse en un ingreso intrascendente respecto a las necesidades del día a día y de los nuevos tiempos, y respecto también a las exigencias y vaivenes del costo de la vida de las economías globales cada vez más inflacionarias.
Además, con el crecimiento del gasto públlico en la mayoría de los países, y la expansión demográfica de determinados países, digamos que lo que menos tienen asegurado las personas en el futuro son sus pensiones de vejez y jubilación.
Así que de seguridad poco o nada... Lo que haces al tener un sueldo fijo, un empleo de los de toda la vida, es sacrificar tu tiempo a cambio de una promesa futura. Te están prometiendo que, mientras seas un buen empleado, tendrás siempre para pagar comida en tu mesa y un techo sobre tu cabeza, y que cuando envejezcas o prescindan de ti en un futuro, tendrás un arreglo o una pensión fija y no pasarás necesidades...
¿Pero realmente es sensato pensar así?
No, no lo es; no se puede apostar por algo así, especialmente porque en temas de economía y finanzas de los países nada es seguro... Sin necesidad de ser pesimistas, sino desde el realismo más sincero, nadie puede garantizar lo que pasará mañana, ni pasado mañana, ni la semana que viene, ni el año que entra... Así que ¿Cómo dar por sentado que en 20, 30 o 40 años tendrán para pagarte tu jubilación o tu arreglo?... ¿Cómo dar por seguro que eso alcanzará para algo trascendente en aquel momento? ¿Cómo puede nadie decirte que debido a un desastre imprevisto, sistema político o económico catatrófico, o cualquier otra razón, no te quedarás sin nada en la época de tu vida en la que más necesitarás de un ingreso?
La respuesta es simple; dado el actual esquema de las cosas, nadie puede garantizarte nada, es decir, ni siquiera en las economías de los países más estables y desarrollados puede nadie garantizarte que teniendo un trabajo actualmente, lo conservarás siempre que seas eficiente responsable y proactivo, y que ese trabajo además de darte tu actual sustento, te garantizará una mejor vejez; simplemente es algo imposible de saber. La pregunta, si realmente ves esto que te estoy comentando y si tienes la suficiente entereza de reconocerlo, es si estás dispuesto a apostar tu futuro a una situación que, en el mejor de los casos, es improbable.
Un cambio de paradigma
Reconocer que tener un ingreso fijo no te garantiza nada ni ahorita, ni a futuro, implica un cambio de paradigma, supone pensar distinto de como lo hace la mayoría de la gente. Simplemente debes saber y aceptar que fuíste condicionado a sostener erróneas creencias, ideas o modos de ver las cosas que se quedaron obsoletos en el tiempo (y quizás todavía aún lo hagas y todo lo que has leído hasta ahora en este artículo esté haciendo un ruido impresionante en tu cerebro), así que no te sientas mal, mantén tu mente abierta y continua leyendo. Quizás las cosas en el mundo fueron así en el pasado, pero no actualmente; es decir, en la actualidad las cosas han cambiado bastante, gracias a la globalización y la tecnología en general, y dentro de ello, muy especialmente, gracias al Internet.
Gracias al Internet, ahora puedes trabajar como freelancer Online, ganar dinero y vivir de ello; y eso te otorga una libertad sin precedentes.
Si tienes un empleo, entonces ¿debes renunciar ya mismo y comenzar a trabajar como un freelancer? No, no estoy diciendo eso, porque hay personas que nacieron para trabajar bajo relación de dependencia, y es algo que es muy válido, porque los empleados siempre deben existir para que el mundo siga girando (y los países y empresas funcionando); pero lo importante es que sepas muy bien cómo son las cosas y no te hagas falsas expectativas sobre la realidad del empleo convencional.
Además, puede darse el caso de trabajes en un empleo de manera provisional, o sea, de que, ya sabiendo como es todo en realidad en el mundo del trabajo convencional, de todas maneras quieras o requieras conservar un empleo durante algún tiempo, mientras logras cierta estabilidad para dedicarte al trabajo freelance, o para montar tu propio negocio o empresa de tus sueños, y es algo perfectamente válido también.
En todo caso, eso sí te puedo decir, la libertad de la que gozan los freelancers es indescriptible e incomparable.
¿Pero qué clase de libertad es la que tiene el Freelancer?
Libertad para aprender, para hacer con su tiempo lo que le plazca, para tratar de ser cada día una mejor persona y un mejor profesional; la libertad de elegir aquello que quiere hacer, la libertad para desempeñarse en aquello en lo que destaca, aquello que más le gusta y que disfruta hacer.
Siendo un freelancer gozas de la libertad de aumentar tus ingresos con tan solo disponerte a esforzarte un poco o mucho más de lo que ya lo haces. Libertad de no tener que rogar por un aumento de sueldo que te sabes bien merecido y esperar a que algún superior en la jerarquía de la empresa tenga a bien concedértelo. Libertad de horarios, jefes, reuniones, libertad para ser creativo, libertad para trabajar con quien te plazca (hablando de clientes y de colaboradores también).
Libertad para trabajar desde donde a ti te dé la gana, libertad para no tener que lidiar con compañeros de trabajo envidiosos o que mal metan en contra tuya en tu lugar de trabajo. A esa libertad, a esa clase especial de libertad es a la que tienen acceso los freelancers hoy en día.
Libertad de ser ser tu propio jefe, establecer cómo, cuándo y en qué trabajar; libertad de construir directamente algo tuyo y personal; libertad para considerarte a ti mismo como una empresa, como una inversión.
Libertad para pensar en ti mismo, en tu presente y tu futuro. Libertad para tratar de forjarte por ti mismo y sin esperar nada de nadie, un mejor presente y un más prometedor futuro. Esa es la libertad que te concede ser un freelancer.
¿Ahora, finalmente, entiendes porqué cada día hay más y más freelancers Online en el Mundo?
Si tienes alguna duda, pregunta o comentario respecto a dicho tema, escríbeme a sefreelance@hotmail.com
¡Hasta la próxima!
Si te fue útil este artículo, compártelo en tus redes sociales.
Si te fue útil este artículo, compártelo en tus redes sociales.
Quizás te interese leer también